lunes, 6 de agosto de 2012

Pilates, un gran aliado...

Hace tiempo hice Pilates y es algo que recomiendo a todo el mundo porque viene muy bien para corregir malas conductas de posturas, y como son estiramientos puros muchos de los dolores más comunes de cervicales y lumbares puede que mejoren muchísimo.

También viene muy bien par a las piernas, bueno, que en general es una maravilla, peeero como todo, antes de ponerse a hacerlo, mejor consultar y claro está, el monitor o monitora tiene que ser muy bueno, ya que si se tiene una afección en la que no convenga hacer esos ejercicios, puede ser peor el remedio que la enfermedad.

¿Porque digo que es un aliado a la hora de afrontar la rehabilitación?, pues porque en Pilates los movimientos se realizan ayudándose con la contracción de los abdominales.

Intentaré explicarlo de forma sencilla y clara.
Si nosotros levantamos un brazo, utilizamos los músculos del hombro y del costado.

Si levantamos el brazo contrayendo la zona abdominal lo más que podamos (y manteniendo la respiración) nos costará menos. Intentarlo.

Requiere un poco de práctica, pero es sencillo.

Poner vuestra mano en la tripa y contraer abdominales.

A la vez que lo hacéis intentar subirlos hacia arriba, hasta que notéis que se tensa la parte superior de la pelvis.

En ese momento lo estaréis haciendo bien.

Ahora viene la gran duda "¿Y cuando respiro?" JAJAJAJAJAJAJA

Pues se respira mientras se hace todo eso jeje inhalando por la nariz y exhalando por nariz y boca, con ritmo pausado pero fluido.

Parece difícil, pero no lo es, de verdad. Nadie nació sabiendo.

Cuando ya veáis que os encontráis sueltos haciendo eso, entonces hacer los ejercicios de rehabilitación ayudándose de esa técnica de Pilates.

Veréis como os resulta mucho más sencillo poder hacer los ejercicios y de paso fortaleceréis toda la zona del tórax que aguanta el peso de nuestro cuerpo.

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